La ITV no verifica específicamente el estado de los sistemas de asistencia al cambio de luces en función de las condiciones de la carretera. La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se encarga de evaluar el estado general de los vehículos para garantizar su seguridad y cumplimiento de las normativas vigentes.
Durante la ITV, se revisan diferentes aspectos del vehículo, como los sistemas de frenado, dirección, suspensión, neumáticos, luces, emisiones contaminantes, entre otros. En el caso de las luces, se verifica que estén correctamente instaladas, funcionando correctamente y que cumplan con los requisitos legales de intensidad, color y ángulo de iluminación.
Sin embargo, la ITV no evalúa específicamente los sistemas de asistencia al cambio de luces en función de las condiciones de la carretera, como los sensores de luz ambiental o los sistemas de luces adaptativas. Estos sistemas, que pueden ajustar automáticamente el haz de luz en función de las condiciones de iluminación, no son objeto de revisión en la ITV.
Es importante destacar que, aunque la ITV no verifique estos sistemas, es responsabilidad del conductor asegurarse de que todas las luces del vehículo estén en buen estado de funcionamiento y ajustadas correctamente para garantizar una conducción segura. Además, es recomendable utilizar las luces adecuadas según las condiciones de la carretera y la visibilidad, siguiendo las normativas de tráfico correspondientes.