La ITV no verifica específicamente el estado de los sistemas de asistencia al cambio de luces en función de las condiciones meteorológicas. La Inspección Técnica de Vehículos (ITV) se encarga de evaluar el estado general de los vehículos para garantizar su seguridad y cumplimiento de las normativas vigentes.
Durante la ITV, se revisan diferentes aspectos del vehículo, como los sistemas de frenado, dirección, suspensión, neumáticos, luces, emisiones contaminantes, entre otros. El objetivo principal es asegurarse de que el vehículo cumple con los requisitos mínimos de seguridad y medioambientales.
En cuanto a los sistemas de asistencia al cambio de luces en función de las condiciones meteorológicas, como los sensores de lluvia o luces automáticas, no se verifica específicamente su funcionamiento durante la ITV. Sin embargo, es importante que estos sistemas estén en buen estado y funcionando correctamente para garantizar una conducción segura en diferentes condiciones climáticas.
Es responsabilidad del propietario del vehículo mantener estos sistemas en buen estado y asegurarse de que funcionen correctamente. En caso de que estos sistemas presenten algún fallo, es recomendable llevar el vehículo a un taller especializado para su reparación o sustitución.
En resumen, aunque la ITV no verifica específicamente el estado de los sistemas de asistencia al cambio de luces en función de las condiciones meteorológicas, es importante mantener estos sistemas en buen estado para garantizar una conducción segura.